
Por ser un hombre libre muchas veces,
otras tantas habré de fallar
sin haber tenido yo culpa:
sólo enérgica dignidad.
Es la mirra infusión de linfa,
fino el oro perentorio que te di,
por la magia incorporada a mi vida,
otro incienso habré de fingir.
Son el Gran Faraón, son Príncipes,
son el Gran Napoleón y el Zar,
son el César, la Armada Invencible
en el fondo de Trafalgar.
Yo no quiero finalmente obedecerles
por vivir de la tierra jamás
ni caminar la ceguera que ofende
esa extraña sensación de libertad.
otras tantas habré de fallar
sin haber tenido yo culpa:
sólo enérgica dignidad.
Es la mirra infusión de linfa,
fino el oro perentorio que te di,
por la magia incorporada a mi vida,
otro incienso habré de fingir.
Son el Gran Faraón, son Príncipes,
son el Gran Napoleón y el Zar,
son el César, la Armada Invencible
en el fondo de Trafalgar.
Yo no quiero finalmente obedecerles
por vivir de la tierra jamás
ni caminar la ceguera que ofende
esa extraña sensación de libertad.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario