
Despídeme de todos
que no voy a volver:
la historia es una tumba
y mi cantata su réquiem.
Ripio de mujer desagradable:
que son diez años, que se depila,
que está en el baño,
que se congela.
La que escribía para mí,
quedó en el puerto;
la que soñaba nuestra vida,
se marchó.
La primavera que me amaba,
me dio un beso,
pero no quise y anduve preso:
ya me cansó.
Y luego llego hasta la casa insatisfecho.
Me siento frente al dios error de la interfás.
Tengo mi pucho, mi aguardiente, mi despecho.
Lloro mi sombra, mi dolor y mi alquitrán.
3 comentarios:
Me encanta su rima obvia (no por obvia facil, no me lo tome a mal, que es mi cumplido) y tambien la sutil... Sus palabras inventadas y esta historia q alcanzo a pescar antes de terminar la lectura...
Le sigo atenta, le espero gustosa...
Hasta la Proxima
El Cuento de nunca acabar
Lo leí tantas veces
Que me terminó por gustar.
Y tú?
Cada día más Cucú(li)
No eludas la primavera, el dolor no pasará
Publicar un comentario