
Probemos nuevamente con intenso pundonor
la total y ambivalente lusitana tempestad,
de tremebunda introspección, alud y nervios
que nos ha unido tras su signo color.
Viril y máxima potencia, destilada y fantasmal,
donde tuerce cada noche mi murciélago pitón,
el ave grácil que arrojándose a la vida vacía
me fecunda flor amarga a cuya sombra va.
La flecha noble que arrojamos ciegos.
La luz convexa que te atrapa y muerde.
El pajarito que era múltiple fragor.
La castidad en que nos hicimos viejos.
La despiadada cruz atada que hierve.
La que sencillamente y tímida calló.
la total y ambivalente lusitana tempestad,
de tremebunda introspección, alud y nervios
que nos ha unido tras su signo color.
Viril y máxima potencia, destilada y fantasmal,
donde tuerce cada noche mi murciélago pitón,
el ave grácil que arrojándose a la vida vacía
me fecunda flor amarga a cuya sombra va.
La flecha noble que arrojamos ciegos.
La luz convexa que te atrapa y muerde.
El pajarito que era múltiple fragor.
La castidad en que nos hicimos viejos.
La despiadada cruz atada que hierve.
La que sencillamente y tímida calló.
1 comentario:
Leí rápido y en una parte dice "Te muerde el pajarito"...jajjajja...todavía me río.
saludos.
Publicar un comentario