
Interminable nauseabunda cruda calma
vida de rápido rugoso impuro mal.
La fervorosa comatosa, mi tristeza
pide aburrida necedad y desesperar.
Oh, qué tamaña contagiosa soledad,
tan así próxima y ruidosa, mi apatía,
la de confusa contusión desilusión:
marido llanto.
Es el cartílago de nadie, es amargura,
sólo es poluto y escorbuto y me disgusta,
es mi problema magdalena cuña pena:
el escondrijo fijo náufrade, procuro dolor.
La trinidad de angelidad fragilidad
que cada cual desnuda y muda: duda angustia,
es nuevamente crudo miento aburrimiento,
es peregrina crin afín tranquilidad.
Marina extensa meridiana incertidumbre,
dolida lágrima, el temido nido miedo
es el mohoso peligroso vano caos,
es la frondosa fría pálida molestia.
Ahora la tierra verde lejos nos gobierna,
de pelo negro, y melodía, y somos nada,
pero dejamos que ese espacio nos ocupe
y sea la gárgola tristeza que su vida cuida y calla,
y nos alegra.
Pero la negra vil guadaña no comprende
nada del cómo y del por qué de tanto llanto
y nos miramos a la cara y seguimos,
yo sin saber y sin querer y sin ser.
Son largas ánimas de risa y nos ahogan,
tan repentinas como impávidos cambios,
porque los ojos de impureza no resisten
el duro embate que nos muele y nos duele:
pero a pesar de todo eso celebramos
y nos vinimos a vivir a la ciudad.
9 comentarios:
Te apoyo hermano!
Vale, socita!
¿Cómo estás cuculi?
"tamaña contagiosa soledad"
ajá, uhm, ahhh...
Estoy bien.
Me gusta estar vivo.
Me encanta ser.
Quien es Nora?
Querido Cucú, también querido, (como sea que se pueda querer en estos espacios)...a veces no entiendo la dicotomía de tus voces y no te comento de ipso porque siempre quedo paralela al ver como se van transformando, en ocasiones dulcificando, como el de abajo o viceversa hacia otro lado...pero intento seguir el vuelo que siempre va hacia algún lado, la ciudad no es amable, como el campo, pero tiene otro tipo de vida y de esperanza en sus paisajes, a veces rudos, a veces, pocas veces, mansos, y el tedio la puebla con más premura...pensaba en eso hace poco, las ciudades sólo se viven por necesidad, no son una límpida opción del alma...
en fin, intenso escrito y sentido, era sólo eso lo que iba yo a decir
un saludo, cucú
hoy pasé por esta página y vi una mariposa volar en ella, es que los cuculies tienen mariposas en los sueños??
emmm...
y el resto de la autobiografía?
jejej
saludos congelados.
Cuculi esta lleno de mariposas jijiji
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