
En el alma de la furia viven lágrimas,
viven ángeles y viejos tamarugos
que se apiadan de mi celo
por ser cada vez más justo,
por vivir la vida pura dignamente,
y tener junto a la puerta mi bastón.
Yo quería ser el grande comandante
de una recia madre nave
por el cielo y en el valle
abrigar una esperanza inclaudicable,
pero nunca hubo una tierra
prometida tras el mar,
y a mi paso por la calle
se encalló la soledad.
¿Qué más?
Ahora que puedo disfrutar el trigo dulce
de la prole y de la bella caminata pueril,
me lo vedan por amar y no rendirme jamás:
soy el loco que se esconde
bajo el quid de los faroles,
el insano y peligroso que destruye su hogar.
¿Qué haré?
Yo no quiero ser de nuevo Cuculí:
ese espasmo de agua trilce
que lloraba dando tumbos,
ya se ha muerto irremisiblemente,
porque nada que haya dicho se cumplió.
Hay un nuevo cascarón
sobre la vieja enramada,
un polluelo de vigor
en sangre dulce y delicada.
viven ángeles y viejos tamarugos
que se apiadan de mi celo
por ser cada vez más justo,
por vivir la vida pura dignamente,
y tener junto a la puerta mi bastón.
Yo quería ser el grande comandante
de una recia madre nave
por el cielo y en el valle
abrigar una esperanza inclaudicable,
pero nunca hubo una tierra
prometida tras el mar,
y a mi paso por la calle
se encalló la soledad.
¿Qué más?
Ahora que puedo disfrutar el trigo dulce
de la prole y de la bella caminata pueril,
me lo vedan por amar y no rendirme jamás:
soy el loco que se esconde
bajo el quid de los faroles,
el insano y peligroso que destruye su hogar.
¿Qué haré?
Yo no quiero ser de nuevo Cuculí:
ese espasmo de agua trilce
que lloraba dando tumbos,
ya se ha muerto irremisiblemente,
porque nada que haya dicho se cumplió.
Hay un nuevo cascarón
sobre la vieja enramada,
un polluelo de vigor
en sangre dulce y delicada.
Hombre libre que ha parido el amor:
se llama Pedro Aravena Arriagada.
se llama Pedro Aravena Arriagada.
1 comentario:
hermosa foto :)
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