9 de junio de 2022
MCLXVIII.- Explico algunas cosas
Yo no puedo de otro modo
y a mis años
evitar querer así cuando la quiero.
Cual apostol paulino
del siglo primero,
navego el mar Egeo de mi Fe,
y publico parábolas
y escribo cartas nobles,
me yergo orgulloso y peregrino
en el ágora gentil del mundo,
al pie de aquel ambón divino,
para hablar de su vida
y su pasión,
y alabar enamorado
su canción genuina,
y anunciar a todo el orbe
su febril Resurrección.
No puedo de otro modo
a los cincuenta
evitar amar así como la amo.
Como un niño adolescente Marco Polo,
atravieso el medio oriente por amor,
y la busco en Cipango
y la encuentro en Catay,
me sumerjo en su Corte de princesa,
tomo nota de esa forma de vivir
en la ruta de la seda del tiempo,
por hablar de su fuego
y su existencia,
para abrir el delicado velo negro
de su loto y de su karma y su brahmán,
y cantar a todo el orbe cuando vuelva
su nirvana de miel
y su cruz reencarnación.
Ya no puedo de otro modo
ser el mismo
pues al fin nos reencontramos de verdad.
No me pidan por favor
que contenga la luz:
ya no puedo sin la vida vivir.
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
1 comentario:
Te amo Pedro, eres el amor de mi vida.
Publicar un comentario