
Canela verde conocí de noche
aquellos ojos derretidos, gigantes,
que se perdieron en albino derroche
para dormir oruga luna en un instante.
Gemí te vas y dijo parto luego,
cual delirante seminal del vino:
mi herida cálida, matriz de fuego
en su mirada, el corazón y el trino.
Pero esas dichas no perduran y yo,
que soy el árido, morí en el mar,
abandoné las caminatas de Dios
y vine al mundo que no tiene lugar.
Delirio tonto y mentiroso mito.
Atar alado cabizbajo, lirón.
Anaranjado enamorado Pedrito.
En el verano de los años del amor.
aquellos ojos derretidos, gigantes,
que se perdieron en albino derroche
para dormir oruga luna en un instante.
Gemí te vas y dijo parto luego,
cual delirante seminal del vino:
mi herida cálida, matriz de fuego
en su mirada, el corazón y el trino.
Pero esas dichas no perduran y yo,
que soy el árido, morí en el mar,
abandoné las caminatas de Dios
y vine al mundo que no tiene lugar.
Delirio tonto y mentiroso mito.
Atar alado cabizbajo, lirón.
Anaranjado enamorado Pedrito.
En el verano de los años del amor.
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